El GP de España siempre ha sido una carrera de estrategias, y los equipos lo saben bien. Tradicionalmente con pocas emociones, el Circuit de Barcelona-Catalunya es considerado un clásico de la Fórmula 1.
Los semáforos se apagaron y la salida fue bastante limpia, con Max Verstappen disparado hacia la primera curva. Con una maniobra muy parecida a la de Portugal, se quedó con la punta sobre Lewis Hamilton.
Una arrancada que nos dejó ver varias buenas salidas, como la de Charles Leclerc, agresiva y determinada. Sergio Pérez hizo lo mismo, adelantando dos posiciones cada uno respectivamente. Daniel Ricciardo, Kimi Räikkönen y Mick Schumacher hicieron lo propio, poniendo la sal en la parte trasera de la parrilla.
Pierre Gasly fue penalizado muy temprano por no estar en la posición correcta en la parrilla de salida, que obviamente le hizo mucho daño a la estrategia.
El único Safety Car del día fue por el apagón del auto de Yuki Tsunoda en la vuelta 9. En la resalida, todos hicieron un buen trabajo, manteniendo sus posiciones.
Es a partir de la vuelta 19 empezaron las entradas a boxes, y las estrategias se empezaron a mostrar.
En la punta, Red Bull parece haberse puesto nervioso por el ritmo de los Mercedes, y decidieron parar antes para evitar un undercut. Al final no les funcionó como esperaban. Era la vuelta 23, con 43 por delante.
Todos los equipos utilizaron los neumáticos medios, como lo había establecido Pirelli, pero además porque se había notado que los duros no eran opción para esta carrera.
A partir de ahí, se normalizó el clásico trenecito español, aunque bastante distinto a ediciones pasadas. Todos sabemos que es muy complicado adelantar, y un ejemplo perfecto fue la lucha entre Ricciardo y Checo, que duró muchas más vueltas de las esperadas.
Daniel se movía para generar turbulencia, y a pesar del DRS, Pérez no se pudo acercar lo suficiente. Dirección de Carrera hizo una llamada de atención al de McLaren por zigzaguear en la recta.
Los de Woking la tuvieron complicada, aunque puntuaron con los dos autos. Quien se llevó la buena nota, ha sido Ferrari. Gran rendimiento de Leclerc, aprovechando su maravillosa defensa. Mientras que Carlos Sainz consiguió adelantar lo suficiente para llevarse una buena cantidad de puntos.
Al final, la pelea por la vuelta rápida comenzó con Valtteri Bottas, seguida por Checo y finalizada con Max. Bottas tuvo una segunda oportunidad que no le rindió frutos.
La estrategia de Mercedes les ha dado la victoria y el doble podio esta vez. Red Bull tendrá que analizar bien lo sucedido si quieren seguir peleando por los campeonatos.