Pocos minutos antes del inicio de los terceros libres en Austria, la Fórmula 1 hizo oficial que el Gran Premio de Rusia se mudará de casa en 2023. Tras llegar a un acuerdo con los promotores se ha decidido trasladar la carrera a un nuevo circuito construido a las afueras de San Petersburgo.
La nueva sede, el «Autodrom Igora Drive» fue diseñado por Hermann Tilke y reemplazará a Sochi, que ha sido sede de la F1 todos los años desde que se unió al calendario en 2014 en el sitio donde albergó los Juegos Olímpicos de Invierno el mismo año.
La FIA le otorgó el estado de Grado 1 al trazado a finales de 2020. Lo que le convirtió en el segundo anfitrión ruso de un Gran Premio de Fórmula 1.
Se encuentra a 54 km de San Petersburgo y a solo 150 km de la frontera de Finlandia, pais natal de Valtteri Bottas y Kimi Räikkönen. Cuenta con 10 diseños posibles de pistas diferentes en aproximadamente 100 hectáreas.
El CEO de la F1, Stefano Domenicali se ha mostrado contento por este acuerdo:
“Me complace confirmar después del trabajo intensivo conjunto con nuestros socios rusos y la evaluación detallada de Igora Drive. La Fórmula 1 competirá en ese increíble circuito a partir de 2023
Estoy impresionado por San Petersburgo y creo que el Gran Premio de Rusia en Igora Drive será un evento increíble».
La Fórmula 1 dice que se darán a conocer más detalles sobre la carrera en los próximos meses. El Gran Premio de Rusia de este año se celebrará en Sochi el 26 de septiembre.
Aunque el aviso ha llegado por sorpresa, es cierto que se venía rumoreando desde hace tiempo. Siempre se ha sabido que Vladimir Putin ha estado muy interesado en llevar la prueba a San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia.