No fue un buen sábado para McLaren en el Hungaroring. Resulta que solo uno de sus autos consiguió pasar a Q3 y fue ni más ni menos que el de Lando Norris.
Como se viene observando desde inicio de temporada, a Daniel Ricciardo se le dificultó mucho la performance del auto. El australiano no consiguió meterse entre los 10 primeros y obtuvo la «pole estratégica».
Tras la clasificación y el golpe de realidad, el ex Renault y Red Bull dejó sus impresiones sobre lo ocurrido:
«Fue un cúmulo de errores en los momentos menos indicados los que me sacan del top 10. Creo que podía dar mucho más, pero no tengo que desesperarme, los resultados llegarán. Está claro que el auto no se amolda a mi forma de pilotaje, por lo que estoy cambiando completamente el estilo.
Hoy me quedé corto por errores propios, pero sé que mañana será mucho mejor. Tenemos posibilidades de adelantamiento y la puesta a punto fue muy buena también. No hay que perder la cabeza y tenemos que seguir insistiendo de la mejor manera antes de las vacaciones».
Vale destacar que el resultado de los británicos en Hungría no fue ni cerca el esperado. A pesar de verse sólidos en las últimas prácticas, Norris fue superado por Pierre Gasly y deberá partir en 6° lugar.
La buena noticia dentro de las pálidas, fue que Ferrari, su rival directo en la zona media, tampoco tuvo un sábado decente. A pesar de que los de Maranello parecen tener mejor puesta aerodinámica para este circuito, el accidente de Carlos Sainz lo hará partir 15°, mientras que Charles Leclerc saldrá justo detrás de Norris.
Ferrari está a solo 15 puntos de McLaren y, además de los de punta, el GP de Hungría nos tiene preparada una gran batalla en pista. Solo resta saber de qué manera administrarán las estrategias ambos equipos, aunque la ventaja inicial será para los británicos.