El Gran Premio de Gran Bretaña de este año ha sido y probablemente sea un referente que marque un antes y un después en los anales de la historia contemporánea de la Fórmula 1. Pudimos ser testigos de como la afición se dividió brutalmente después de la maniobra que podría definir el campeonato, algunos a favor y otros en contra.
Las celebraciones post carrera han sido ampliamente cuestionadas por el hecho de que uno de sus protagonistas, Max Verstappen, acabara en el hospital. Sin duda el hecho de que Sir Lewis Hamilton haya estado en casa, respaldado por la intensa afición de Silverstone puso leña al fuego. Sumado al hecho que relajaron un poco las restricciones que planteó la pandemia, las emociones se desbordaron creando un maremágnum en pleno verano inglés.
Por su parte, Red Bull, que dicho sea de paso, tiene su parte local, desbordó en ira el tono del festejo. A su ver fue irrespetuoso el alarde mientras que un piloto estaba en revisión tras la caricia de 51 G a la que fue sometido.
El asesor del equipo Austriaco, Helmut Marko evidenciaba el “estilo” de Mercedes. El mismo Verstappen, a través de sus redes, tachó de “irrespetuoso” el comportamiento de Hamilton.
Mientras que la escudería de las flechas plateadas, declaró que estaban altamente informados acerca del estado de salud de Max. A su juicio no ameritaba la cancelación de celebraciones.
El Jefe de equipo de Mercedes, Toto Wolff, manifestó su opinión acerca del impacto que tuvo el efecto Silverstone:
«Es importante entender todos los comentarios que hemos recibido.
Tuvimos la comunicación de la alta dirección de Red Bull de que Max estaba bien. Christian Horner mencionó a Michael Masi [director de carrera de la F1] por el intercomunicador que estaba ileso y bien, y la FIA nos dio una respuesta similar.
Así que en ningún momento habríamos celebrado si Max se hubiera lesionado. Y creo que eso es muy importante de entender».
Wolff, no perdió oportunidad para salir en defensa del heptacampeón, argumentando que Sir Lewis no estaba al tanto que Max paró en el hospital. Así mismo, que el mismo Hamilton inquirió si el piloto Holandés se encontraba bien:
«Lewis preguntó, incluso en el coche mientras pasaba por el lugar del accidente, si Verstappen estaba fuera del monoplaza. Recibió la respuesta de que había salido por su propio pie.
La única información que recibimos fue que Max estaba bien, y por eso no hubo necesidad de dar más detalles a Lewis».
Otra de las razones que Toto argumentó en defensa del equipo, es que fue una victoria muy significativa por la racha de derrotas consecutivas que atravesaron. También fue severo en sus opiniones respecto a Red Bull, pues a su parecer fueron muy lejos en el nivel de crítica:
«No debemos olvidar que ganamos un gran premio después de cinco fines de semana negativos. Fue Lewis quien ganó el Gran Premio de Gran Bretaña, y está claro que eso hace que las emociones se disparen.
En cuanto a los comentarios que se hicieron, a veces difamatorios, a veces muy personales, creo que cada uno tiene que hacerlo a su manera. Solo lo vemos, pero desde mi punto de vista, no hay nada que decir realmente ante eso».
La polarización posterior al Gran Premio es tangible y pone a los equipos a competir por algo más que el campeonato. Ojalá y la escalada en el nivel de competitividad y de ver quién es el mejor, se demuestre sobre la pista. Con maniobras de campeones y que no escale la agresividad, pues hemos visto que el precio a pagar, es muy caro.