A las 10 de la noche conocíamos la noticia de manera oficial. Sebastian Vettel quedaba excluido del Gran Premio de Hungría. El alemán que había logrado un más que meritoria segunda posición perdía su plaza.
Debido a esta descalificación, Lewis Hamilton sube al segundo lugar del GP de Hungría y Carlos Sainz logra la tercera plaza.
El motivo esgrimido era que la FIA no había conseguido extraer un litro de carburante para el habitual análisis después de la carrera. Así lo explicaba el Delegado Técnico de la FIA, Jo Bauer: “Sólo fue posible tomar una muestra de 0,3 litros”.
Por este motivo, y en virtud de lo que dice el reglamento, Vettel fue excluido de la clasificación final
«El auto No. 5 no cumple con los requisitos del Art. 6.6 Reglamento Técnico de la FIA. De acuerdo con el Art. 6.6.2, los competidores deben asegurarse de que se pueda tomar una muestra de 1.0 litro de combustible del auto en cualquier momento. . Se siguió el procedimiento, sin embargo, no se pudo tomar la muestra de 1,0 litro de combustible”.
Pero aún es posible que esto no quede así. Ya que inmediatamente de conocerse la sanción, Aston Martin presentó su intención de apelarla.
El equipo considera que según sus cálculos, aún deben quedar 1.74 litros de combustible en el depósito, por lo que todavía habría 1.44 litros en el sistema que la FIA no pudo recuperar.
Vettel incluso se detuvo a dos curvas del final de la vuelta de regreso al pitlane, tras de sufrir lo que el equipo cree que fue un problema con la bomba de combustible. También creen que el fallo de la bomba podría explicar por qué no se ha podido extraer el resto del combustible.
El coche permanecerá incautado en el garaje de boxes de la FIA en el Hungaroring durante la noche. Hoy se seguirá trabajando para encontrar el combustible que falta una vez que el coche sea transportado a las instalaciones de la FIA en Francia.
Por todo ello, el jefe del equipo, Otmar Szafnauer, anunció la intención de apelar. Por ellos los comisarios levantaron acta de que se les había comunicado la intención, tal como marca el reglamento.
Más tarde lo confirmo ante los medios:
«Puedo confirmar la intención de apelar. Así que una vez que sepamos más, entonces si tenemos motivos lo haremos. Si vemos que no, lo dejaremos.
Según todos nuestros cálculos, todavía deberían quedar 1.44 litros de combustible en el coche después de que se tomara la muestra de 300 mililitros”.
Como vemos, el emocionante GP de Hungría aun no ha dado el banderazo final. Aunque sea en los despachos.
