La salida del GP de Hungría sigue trayendo cola. Ambos pilotos de Red Bull vieron como sus posibilidades de lograr un buen resultado en Hungaroring se fueron al traste tras la melé provocada por el Mercedes de Valtteri Bottas.
Los comisarios que deliberaron la acción, tomaron la decisión de penalizar con cinco posiciones la salida de Valtteri Bottas en el trazado belga de Spa-Francorchamps. En la melé, el finlandés se llevó puesto a Lando Norris y este a su vez se llevó a Max Verstappen provocándole daños en la zona de los bargeboards derechos. Además, Bottas en su trayectoria también golpeó a Sergio Pérez provocando su abandono. Por ello, el director del equipo Red Bull, Christian Horner ha tachado de ridícula la sanción que ha recibido el finlandés:
«Valtteri hizo un gran trabajo para ellos al noquear a nuestros dos coches. Recibe la penalización para la próxima carrera, pero lo compensa en dos vueltas en Spa. No es un castigo real y no repara el daño que nos hizo, sobre todo cuando miras el límite presupuestario. Los efectos son inmensos y los costes, brutales»
Red Bull tuvo que cambiar también a última hora el motor de Max Verstappen por problemas derivados del accidente de Silverstone. Todo apunta a que ahora también tendrán que cambiar la unidad de potencia del monoplaza de Sergio Pérez. De confirmarse esta situación, ambos pilotos se encuentran entre la espada y la pared, ya que sustituir un nuevo motor conllevaría una sanción:
«Las primeras impresiones indican que este motor tampoco está operativo. Es muy frustrante, también para Honda porque no se debe a la estabilidad, sino a accidentes que no causamos nosotros»
¿Veremos una vendetta de Red Bull durante el GP de Bélgica o seguirán aumentando las hostilidades durante el verano? Al regreso de las vacaciones de verano veremos si han recapacitado alguno de ellos sobre los últimos sucesos.