Terminó el GP de los Países Bajos y las sensaciones encontradas varían en la parrilla. La alegría de Ferrari se traduce en que pudieron superar a McLaren en el campeonato de constructores.
No obstante, el sabor amargo de Zandvoort lo probó Carlos Sainz. El español terminó 7° tras haber sido superado por Fernando Alonso en la última vuelta por el desgaste de neumáticos que sufría.
Tras una carrera sin demasiadas emociones y esta desilusión a manos de su compatriota, Sainz dejó sus impresiones:
«Fue una carrera rara, donde desde la segunda o tercera vuelta no tenía ritmo. Deslizaba mucho más que el viernes y el sábado, fue algo muy raro y diferente. No entendemos por qué pasó, pero fue un domingo bastante decepcionante para mí.
Fui perdiendo rendimiento, eso se reflejó en pista por el desgaste del neumático. El mal ritmo se sumó a eso y es una combinación que da un resultado lógico».
En cuanto a la carrera en general, el piloto español señaló que no tuvo demasiada acción, y le faltó la oportunidad de tener enfrentamientos en pista:
«Fue un circuito divertido de manejar, pero en cuanto a la carrera varió mucho. Pasó de ser una carrera donde buscaba atacar a Gasly y a Leclerc a ser una donde miraba los espejos todo el tiempo. No fue demasiado apasionante».
Con estos resultados, Charles Leclerc consiguió adelantar a Sainz en el campeonato de pilotos. El monegasco suma 92 puntos y subió al 6° lugar, mientras que el español acumula 89.5 en la 7° ubicación.
Ferrari, por su parte, recuperó terreno en la lucha por el 3° lugar y consiguió adelantar a McLaren. Los italianos suman 181.5 puntos, mientras que los de naranja los miran un lugar más abajo con 170.
La próxima cita todo apunta a la catedral de la velocidad en Monza. Un circuito harto conocido por Ferrari y donde la potencia es reina máxima.