El abandono del monoplaza de Valtteri Bottas en el Gran Premio de Qatar hizo saltar todas las alarmas ante un posible cambio de motor. No obstante, desde Mercedes aseguran que el estado de su unidad de potencia es óptimo, y no necesitará ser sustituido para el Gran Premio de Arabia Saudí, que se celebra este fin de semana en el trazado de Jeddah.
El finlandés explicó que retiraron el coche por motivos de seguridad. No quisieron arriesgarse a dañar el coche más de lo que ya estaba por el pinchazo. De esta manera aclaraba que no se debió a un fallo que no se pudiese reparar en el motor:
«El coche estaba un poco demasiado dañado, así que no queríamos romperlo más. También creo que no había opción de conseguir puntos, así que pudimos ahorrar algo de kilometraje en el motor».
Tras las revisiones pertinentes, los mecánicos de Mercedes descubrieron que uno de los conductos de la unidad de potencia estaba dañado y había causado una fuga. Sin embargo, según informa el portal web Racing News 365, todo está en orden tras las últimas comprobaciones de los alemanes.
Bottas ya ha superado los elementos permitidos por el reglamento en cinco de los siete componentes de su motor. Concretamente, está usando su sexto motor de combustión, su quinto turbo, su quinto MGU-H, su cuarto MGU-K y su tercera centralita. Lo que le convierte en el piloto que más ha penalizado en la parrilla por cambios de motor.
En duelo del próximo domingo serán muy importantes los respectivos compañeros de equipo de Lewis Hamilton y Max Verstappen. Valtteri Bottas y Sergio Pérez tendrán que poner todo de su parte para restar el mayor número de puntos a sus rivales. Con solo dos carreras para el final y ocho puntos de ventaja, hasta el punto extra de la vuelta rápida puede jugar un papel crucial.