Honda se marcha de la Fórmula 1 tras haberse alzado con el campeonato del mundo de pilotos de la mano de Max Verstappen. Y es que, los últimos años de la mano de Red Bull han sido muy fructíferos para la marca nipona. Pero no hay que olvidar que la vuelta a la competición en el año 2015 junto a McLaren, no lo fue tanto.
Estos últimos tuvieron un pasado de bonanza juntos a finales de la década de los 80 y principios de los 90. Por ello, el fabricante japonés se volvió a aliar con los de Woking para tratar de repetirlo en la era híbrida. No obstante, los resultados no fueron los esperados. Según el director de F1 de Honda, Masashi Yamamoto, el fracaso del proyecto se debe a dos claves:
«A partir de los días de McLaren, hemos aprendido mucho de ellos, pero creemos que teníamos demasiado respeto mutuo. Es por eso que tal vez tuvimos una falta, un poco, de comunicación y luego fue una pena que el proyecto no saliera bien».
Y como si de un guion de película se tratase, cuando los nipones consiguieron fabricar un motor ganador, los directivos de Honda decidieron que la Fórmula 1 ya no entraba en los planes a futuro de la marca. Según han afirmado a lo largo del último año, la decisión se debe a su voluntad de eliminar su huella de carbono y centrarse en el futuro de la movilidad eléctrica:
«Dejar la F1 fue una decisión muy importante para Honda, y fue para los neutrales en carbono y también para los clientes de todo el mundo. Aunque estamos teniendo buenos resultados este año, nunca tuvimos una discusión para quedarnos aquí».
Haciendo un repaso de los mejores momentos desde la vuelta de Honda a la Fórmula 1, a Yamamoto lo cuesta escoger el instante más especial. Sin embargo, resalta la emoción de Australia y Austria en 2019, primeros éxitos de la mano de Red Bull:
«El mejor momento para mí es el Gran Premio de Australia en 2019, el primer podio con Red Bull Racing. También, por supuesto, Austria 2019, la primera victoria con Red Bull».
Y es que, desde Honda, seguro que ni en sus mejores sueños imaginaban poder luchar por victorias cuando, tan solo dos años antes, atravesaban su particular andadura por el desierto de la mano de McLaren.