Sergio Pérez brilló en su primera temporada en Red Bull

Hace una semana que se terminó la temporada 2021 de la Fórmula 1. Una de las campañas más emocionantes y cerradas, no solo de los últimos tiempos, sino de la historia de la máxima categoría. Max Verstappen consiguió vencer finalmente al siete veces campeón del mundo en la última vuelta de la última carrera. Mientras que el equipo Mercedes pudo mantenerse como campeón de constructores, pero por poco.

Red Bull le pudo hacer frente al equipo alemán, de la mano de Verstappen y Sergio Pérez, a quien contrataron hace apenas un año para sustituir a Alexander Albon. La experiencia de 10 años de Pérez, pesó en el equipo. A pesar de un inicio difícil el mexicano consiguió los resultados y mostró de lo que es capaz.

La primera mitad del año, fue de aprendizaje y adaptación. Checo fue fuertemente criticado, pero la verdad es que nadie ha podido domar a ese Red Bull como lo hizo él. Obvio, nadie que no sea Max Verstappen, para quien el RB16B está prácticamente diseñado.

Desde el primer Gran Premio, Sergio Pérez tuvo que lidiar con contratiempos. En la vuelta de formación del GP de Bahréin, el Red Bull se desconectó completamente en la vuelta de formación. Pérez tuvo el temple para reiniciarlo y poder largar… hasta el fondo de la parrilla. El tapatío hizo una gran remontada para quedarse con el quinto puesto.

En Emilia Romagna, Checo pudo vencer a su compañero de equipo en la sesión de calificación con una gran vuelta, lo que lo puso solo detrás de Hamilton en la parrilla de salida. Sin embargo cometió un par de errores que lo dejarían fuera de los puntos. Una carrera dolorosa para Pérez, con el despiste durante el Safety Car y otro al colocar el neumático blando.

A partir de ahí, Portugal, España y Mónaco fueron carreras donde se pudo colocar en cuarto y quinto puesto. Pero no lograba el tan ansiado podio que esperaban sus aficionados.

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Pero llegó entonces Azerbaiyán, lugar donde Pérez había conseguido dos veces el tercer puesto. Bakú es una pista que conoce bien y se puede decir que “se le da”. Checo largó desde el sexto puesto, pero logró colocarse en posición de podio. Y así, cuando volaron los neumáticos de Max Verstappen y Lance Stroll, se detuvo la carrera, en una decisión controvertida, como tantas este año. Dejando al mexicano a merced de Lewis Hamilton en una relargada.

Parecía difícil contener al Mercedes, pero el tapatío echo mano de toda su fortaleza mental en la largada. Fue así que el que cometió el error fue Lewis Hamilton y Pérez consiguió su primera victoria con el equipo Red Bull.

Nadie había ganado como compañero de Max Verstappen desde que Daniel Ricciardo lo hizo en Mónaco 2018. Esa fue una buena inyección de motivación para Checo y un calla bocas para sus detractores. Así como un paso más para ganarse el respeto de su equipo.

Volvió a subir al podio en Francia. Pero a ese tercer puesto seguirían carreras difíciles, incluyendo resultados fuera de los puntos en Gran Bretaña, Hungría y Bélgica, en diferentes circunstancias. Algunas sacrificando por el equipo, en otras cometiendo errores personales.

Pero como siempre, Pérez va de menos a más. El cierre del año fue impresionante, aunque las estadísticas no lo muestren. En Turquía, Estados Unidos y México, Checo se subió al podio. Y cerró con actuaciones espectaculares, apoyando al equipo para que Max Verstappen consiguiera el campeonato.

Las batallas que tuvo con Lewis Hamilton fueron de libro de texto. Mostró toda su experiencia, capacidad y temple para mantenerse por delante del inglés. Y no solo en Abu Dhabi, que es la más reciente.

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Además de tener que enfrentar remontadas, malas paradas en boxes, malas estrategias tanto en calificación como en carrera. La verdad es que Valtteri Bottas le ganó en el campeonato de pilotos por los grandes premios en los que el tapatío se sacrificó en pos del equipo.

Y no, no es mártir, simplemente es un piloto que trabaja en conjunto. En Aston Martin es obvio que lo extrañan. Checo es líder, pero también sabe en qué momento ser compañero.

Desde el principio de la temporada aseguré que Red Bull estaba formando un gran equipo, solo había que esperar un poco. Y así fue, ahora están más compenetrados, más unidos y eso los puede beneficiar mucho para la próxima temporada con la nueva reglamentación.

Tendremos autos nuevos y quien se adapte más pronto y pueda sacar lo mejor del auto más rápido será quien esté adelante. Red Bull se ha armado bien y Pérez será una pieza importante.

Personalmente siempre creí en su capacidad, en su gran talento. Hoy tras un año con un equipo competitivo, puedo decir que Checo cumplió con las expectativas y, ¿saben qué es lo mejor? En el equipo Red Bull se ve que lo aprecian, se ha ganado el respeto y la admiración de todos. Incluso de Christian Horner y del más difícil, Helmut Marko. Por eso creo que se puede decir que Sergio Pérez brilló en 2021 y lo seguirá haciendo en la máxima categoría por mucho tiempo más.