Luego de la presentación del nuevo W13, Mercedes preparó un shakedown el mismo día y el encargado de llevar el auto primero a la pista fue George Russell.
Con sólo 100 kms permitidos y montando neumáticos de demostración, la escudería alemana pudo verificar sistemas y conseguir algunos datos de cara a las pruebas de pretemporada en Barcelona.
La temporada 2022 será el inicio de una nueva era en la Fórmula 1, con la introducción del tan comentado reglamento técnico que afecta mayormente a la aerodinámica de los monoplazas. La nueva filosofía implica que los pilotos sólo habían podido imaginar las sensaciones reales desde el simulador.
En estas épocas, el Circuito de Silverstone es fácil que esté mojado, lo que dificulta un poco las lecturas de los equipos. Pero para suerte de Russell, en el momento en que se puso en pista, había una fuerte tormenta, con ráfagas de viento importantes.
En sus palabras, el británico mostró las primeras sensaciones del coche y del clima:
“Diría que el coche se comportó como esperábamos en cierta medida. Pero las condiciones impiden que tengamos una gran cantidad de cosas para tomar. El viento hoy ha sido una verdadera locura, así que tuve que arreglármelas para mantener el coche dentro de la pista.
Creo que hasta ahora estamos en un buen lugar. Me parece que tenemos una buena ventana de aquí a los test en Barcelona”.
Al referirse a las diferencias entre lo que habían probado en el simulador con el coche real, Russell cree que todo está muy alineado, y tendrán que correlacionar los datos para evaluar las diferencias:
“Creo que el coche estuvo muy en la línea de lo que hemos visto en el simulador. Volveremos a correlacionar los datos. Será un proceso de aprendizaje constante. Vamos a tomar el día de hoy con una pizca de sal y luego sólo seguiremos con el programa.
Necesitamos asegurarnos de que el coche funcione bien, que nosotros los pilotos nos sintamos cómodos y poder estar en el mejor lugar posible de cara a los test de Barcelona”.
El ex piloto de Williams ha formado parte del equipo Mercedes desde 2017, incluso reemplazó a su nuevo compañero, Lewis Hamilton, en el GP de Sakhir 2020. Este año será su primera temporada con las flechas plateadas.
A pesar de haber conducido todos los monoplazas de Mercedes, admitió haber sentido algo especial cuando comenzó a rodar con el W13 el viernes:
“Cuando el coche se encendió por primera vez, se me puso la piel de gallina. Haberlo conducido tantas veces y dar tantas vueltas en el simulador no es lo mismo. Tampoco el haber visto tantos dibujos de él. No hay nada como ir a un circuito y ponerlo en la pista.
Creo que me devolvió a mis orígenes. Ya sabes, un día frío y húmedo con viento en Silverstone, pero ahora con el equipo Mercedes F1. Espectacular”.
Definitivamente, los ojos de los fanáticos de Woking estarán puestos en lo que pueda hacer Russell con ese auto. Y si podrá ponerle las cosas difíciles a los Red Bull, o a cualquier otro que pretenda ponerse por delante.