McLaren no consigue ser la escudería de antaño, puntuando constantemente y peleando por subirse de vez en cuando al podio. Esa era la sintonía que llevaban pero, parece que este nuevo año no ha empezado de la mejor manera. Ya vimos en los tests un equipo compacto y con papeletas a ser competitivo, aún así, en la Fórmula 1 nada se puede dar por hecho.
Entrando en cuestión, la F1 vuelve a Melbourne, Australia, precisamente al país natal de Daniel Ricciardo, donde ya echaba de menos una carrera en su circuito, el inaugural no hace más de tres años:
«¡Es bueno estar en casa! Estoy más que emocionado de volver a la pista en Melbourne. Nada supera a un público local, y los aficionados australianos son algunos de los mejores del mundo.
Regresé a Perth desde el Gran Premio de Arabia Saudita y me siento descansado, preparado y emocionado para enfrentarme a uno de mis fines de semana favoritos del año. También será genial probar el nuevo trazado por mí mismo, en particular la curva a la derecha, ya que parece rápida”.
En el Gran Premio de Arabia Saudí, vimos como el MCL36 de Daniel se paraba en la entrada del pit lane.
Todo esto apuntó a un fallo flagrante en el tan criticado motor Mercedes que finalmente le dejó sin puntos:
“El final de mi carrera en Jeddah fue frustrante, pero fue alentador ver cómo el arduo trabajo del equipo está comenzando a dar sus frutos poco a poco. Hubo muchas cosas positivas que sacar del fin de semana y estoy mucho más cómodo en el auto.
Todavía tenemos un largo camino por recorrer, y estamos enfocados en la tarea que tenemos entre manos. ¡Volvamos a salir, luchemos lo más fuerte que podamos y, con suerte, hagamos un poco de espectáculo!”.
En cambio, tras la retirada de su compañero, Lando Norris aprovechó los abandonos de Fernando Alonso y Valtteri Bottas, que rodaban por delante de él, para ascender posiciones y conseguir un séptimo lugar que le premió con 6 puntos.
Sin embargo, eso ya es agua pasada y el británico ya se está centrando en el fin de semana que le espera:
“Tengo muchas ganas de salir a la pista con el nuevo coche en Melbourne, especialmente con los cambios que han hecho desde la última vez que corrimos allí hace tres años. Estoy emocionado de ver qué progreso podemos lograr.
Es una carrera especial para mí, ya que hice mi debut allí en 2019 y con la pandemia, no hemos corrido allí desde entonces, así que he estado trabajando duro en el simulador para volver a la pista, especialmente con los nuevos cambios”.
Norris se muestra tranquilo y optimista pese a que el inicio de temporada no fuese el deseado. Tras dos carreras, cree que, poco a poco, su monoplaza se mostrará más competitivo y que cada paso que den, deben ser firmes y constantes para conseguir sus objetivos:
“La carrera en Jeddah mostró los pequeños pasos que hemos dado, pero todavía tenemos un largo camino por recorrer. Los puntos fueron una buena recompensa por el arduo trabajo. Como equipo, en la pista y en la fábrica, estamos trabajando arduamente para desarrollar el automóvil y desbloquear más rendimiento. Pero sabemos que tenemos un largo camino por recorrer”.
Andreas Seidl, el maquinista del tren McLaren, sigue confiando en que, con el tiempo, el ritmo y rendimiento llegarán por inercia. También cree que, tras los cambios en el circuito, habrá más batalla y las carreras serán más emocionantes:
“El equipo y yo estamos emocionados de estar de regreso en Australia después de algunos años. Especialmente por la importancia de que sea la primera carrera en casa de Daniel con McLaren. Será genial ver cómo los nuevos autos reglamentarios responden a esto, ya que debería generar carreras emocionantes y buenas batallas en la pista.
El GP de Australia siempre es una gran carrera pero más complicada. Si, se tiene en cuenta el desfase horario y la logística de las carreras tan lejos de nuestra base en Woking. Pero el escenario mundial es una de las razones por las que la F1 es tan emocionante. Seguiremos dando todo y hacer lo que podamos para maximizar nuestro resultado en Melbourne”.
Para McLaren, el Gran Premio de Australia es crucial para el estado anímico de la escudería. Y tras un mal inicio, deben recortar puntos a los que ahora son sus rivales directos y conseguir sumar con ambos coches.