Luego de la más emocionante Carrera Sprint que hemos tenido desde su creación, el GP de Emilia Romagna se antojaba como la continuación del drama Ferrari vs Red Bull. Y en efecto, no nos han decepcionado.
Recordemos que los de Milton Keynes no han tenido de su lado la fiabilidad, lo que los alejó de los puntos con el principal rival de este año.
Pelear contra Ferrari en territorio Ferrari aquí en Imola es un desafío que pocos han conseguido superar, pero que al mismo tiempo es un aliciente enorme para las emociones y la motivación del equipo.
Es entonces cuando el siempre cambiante clima de la región italiana tiene mucho que decir. La pista comenzaba mojada, con serias intenciones de parte del cielo de dejar caer bastante más lluvia durante la carrera.
Con todo y esto, la bandera verde ondeaba al final de la parrilla para dar paso al apagón de los semáforos y el inicio de una batalla muy esperada en la punta. Pero sin menospreciar lo que la media tabla nos tenía preparado.
Max Verstappen, con la Pole entre sus manos salió como bala sin patinar, manteniendo la posición. Charles Leclerc se quedó patinando y perdió la posición con Sergio Pérez, que igualó la buena salida de su compañero.
Carlos Sainz, desde atrás y buscando adelantar posiciones, fue tocado por Daniel Ricciardo, que lo hizo trompear y quedarse en la grava. Mal y de malas para el español que de nuevo abandona en la primera vuelta. Ricciardo pudo continuar, pero su carrera se arruinó por completo.
La salida nos obligó a levantarnos del asiento con la tensión elevada para que fuéramos testigos de lo que el mítico trazado le permitía a los monoplazas. Con un circuito que le pide más al piloto, justo de la vieja escuela, se nos recuerda de golpe y porrazo lo maravilloso que es el Gran Circo.
El Safety Car temprano no movió las estrategias de neumáticos intermedios. Sebastian Vettel y George Russell recuperaron 5 posiciones cada uno en la arrancada, lo que los ponía en buena oportunidad de puntuar bien.
La relanzada en la vuelta 5 mantuvo todo igual, hasta que dos vueltas después llamaron a Fernando Alonso a boxes para retirarlo. El español tuvo un toque con Mick Schumacher en la arrancada que le rompió el pontón derecho.
Kevin Magnussen se puso en modo vikingo para defender su posición, pero se tuvo que conformar con quedarse en la misma octava de la que salió. Una vuelta después, Leclerc supera a Lando Norris que le había robado la tercera plaza en la salida.
Unas vueltas después, tuvimos una buena pelea entre Magnussen y Russell, con el británico quedando por delante del danés. Valtteri Bottas se unió a la conversación, pero no pudo pelear con el mismo motor al Haas.
La ventana de pits comenzó en la vuelta 17, luego de unos momentos de dudas sobre lo mojado de la pista. Prácticamente todos comenzaron el desfile, con Checo evitando un undercut de Ferrari. El mexicano adelantó a Charles casi de inmediato cuando el monegasco salió de boxes.
En la andanada de autos por la calle de boxes, Esteban Ocon tuvo una salida insegura del pit, bloqueando el paso de Lewis Hamilton. 5 segundos para el francés que de cualquier manera no estuvo en ningún momento dentro de los puntos.
A partir de ahí, la carrera se estabilizó, pero nos tuvo pendientes al ver una batalla entre tres autos durante casi toda la carrera. Alexander Albon delante de Pierre Gasly, mientras que atrás Hamilton. Una situación casi que vemos por primera vez, con el Mercedes sin poder adelantar al AlphaTauri.
Una de las sorpresas ha sido Yuki Tsunoda, que en silencio estuvo peleando y recuperando posiciones.
Llegamos a la última parte de la carrera y la vuelta 50 marcó el inicio de otro intento de Ferrari por hacer algo distinto. Llamaron a boxes a Charles, le montaron las gomas blandas, pero una falla de cálculo hizo que saliera detrás de Norris.
Leclerc tuvo que esperar una vuelta para recuperar posición, dando oportunidad da Red Bull de llamar a Checo con una parada gratis, montando las mismas gomas para defenderse. Luego, con otra parada gratis, Max entro a esa calle de boxes llena de historia para montar las rojas y mantener su primera posición.
Dos vueltas después, en la 54, el primer error del monegasco al trompear por pasar muy agresivamente sobre los bordes de la pista. Recuperó rápido, pero se fue hasta la novena posición. Esto le dejó en bandeja de plata el último lugar del podio a Norris, siendo otra de las grandes sorpresas en suelo italiano.
Vettel no pudo aguantar a Tsunoda, pero se convierte en los primeros puntos de Aston Martin, algo que necesitaban desesperadamente. También Russell hizo un trabajo que nadie esperaba, puesto que de salir en P11, terminó en cuarto luego de soportar los ataques de un Bottas que tuvo un segundo aire en la segunda mitad de la carrera.
El desafío en suelo italiano, en tierra de Ferrari a Ferrari, se consumó. Red Bull consigue el primer 1-2 de la temporada, con un desempeño bastante superior a los de Maranello. Charles Leclerc terminó en un sexto que sabe a derrota.
Primer Grand Chelem de Max en la temporada, devolviendo lo que Leclerc hizo en Australia.
Los puntos en ambos campeonatos se recortan, y la temporada comienza a ponerse todavía más interesante. La siguiente carrera será el estreno del GP de Miami en dos semanas.