En el automovilismo un piloto es tan bueno, o tan malo como sus últimos resultados. Y no es diferente para los campeones del mundo que son tan súbditos de la tabla de posiciones como cualquier novato.
La mala suerte empieza a pasar factura en el seno de Enstone, Esteban Ocon tiene a su cuenta 24 unidades mientras que el bicampeón de 2005-06 sólo ha cosechado 2. Si añadimos que estos son resultado de un 9° puesto en la primera carrera de la temporada, el panorama no puede ser nada tranquilizante.
Las actuaciones del asturiano, sin embargo, no han dejado de subrayar el gran talento, velocidad y forma física que mantiene a sus 41 años. Cada carrera la sensación es que Fernando Alonso se acerca más a la punta, pero cada gran premio surge algún problema que impide consumar la promesa del auto.
Los hechos claros son: El veterano español cuenta con un contrato que expira al final de esta temporada. Y la organización Alpine tiene un gran talento a la espera de una oportunidad en el australiano Oscar Piastri, actual campeón de la F2.
La presión de los medios se incrementa sobre el jefe de equipo Otmar Szafnauer, quien cuestionado directamente sobre su mancuerna de pilotos futura tuvo que enfrentar el tema:
“No hemos pensado sobre eso, la verdad es que es un poco temprano todavía. Pero para Silverstone estaremos hablando al respecto”.
Szafnauer fue también muy rápido en acallar los rumores que ponen a Piastri en el lugar de Nicholas Latifi a mediados de esta misma campaña:
“No hemos considerado eso de manera seria, no sé lo que pase en Williams. Sí, si hemos escuchado los rumores.
Al respecto de esas posibilidades, cuando McLaren vino y nos preguntó directamente si podían utilizar a Piastri como piloto de reserva, dijimos que sí. Y la razón es que entre más tiempo de manejo tenga en lugar de estar sentado, será mejor. Así que lo tendremos como una opción estratégica. Pero al respecto de lo que suceda en Williams, no sé nada”.
Sea cual sea la decisión, los siguientes meses pondrán a prueba el temple de Alonso, y la estabilidad emocional de cada uno de sus seguidores también. Cada buen resultado alimentará la fe, cada infortunio dolerá el doble de ahora en adelante.