Después de tener un fin de semana para el olvido en el Principado de Mónaco, Haas y sus pilotos, Kevin Magnussen y Mick Schumacher, tienen sus miradas y sus esperanzas puestas en el Gran Premio de Azerbaiyán, en busca de redención.
Para ambos pilotos, es un circuito en el cual tienen kilómetros recorridos. Por su parte, K-Mag ha tenido 4 Grandes Premios con modestos resultados. Mientras que su coequipero no se queda atrás en ese departamento.
Es importante mencionar que el circuito de Bakú es callejero y se encuentra ubicado entre el nuevo y viejo mundo. Ofrece una panorámica muy singular y atractiva, poniendo a contrapunto el pasado con el futuro. Los pilotos van corriendo entre rascacielos y vestigios de antiguos moradores.
En términos de la exigencia de la pista, tiene largas rectas que plantean un reto al tener un frenada muy agresiva de 90°. El sector final pone a prueba la velocidad punta de los monoplazas y significa un reto para el equipo norteamericano.
En palabras, el Jefe del equipo Haas, Guenther Steiner, ve grandes retos a enfrentar. Sobre todo, porque hay dos Grandes Premios espalda con espalda y en distintos continentes, con el Gran Premio de Canadá:
“Los retos consisten en que vas de un continente a otro. Es un viaje muy largo y el equipo está trabajando muy duro para hacer las cosas. De eso se trata, de tener un equipo trabajando duro. Pero es un desafío porque tienen sólo un par de días para tener todo listo para la siguiente carrera.
Si existe algún daño en el auto, complica más las cosas. Por ello esperamos no haya ningún daño en Bakú. Para los planes de la siguiente temporada, sería extraordinario si podemos combinar las carreras por región. Sé que Stefano trabaja muy duro y llevará las cosas en la dirección correcta para el próximo año”.
En cuanto a las oportunidades que tiene Haas para lograr un buen resultado en un circuito intricado y veloz, Steiner se muestra optimista:
“Obviamente el circuito está divido en dos partes. Una muy veloz y una parte muy intrincada. Creo que hemos tenido un buen progreso con nuestro auto. En España, con la configuración, lo hicimos bien en determinadas circunstancias.
Necesitamos encontrar la clave en la puesta a punto. Creo que podemos tener un mejor resultado, como lo hubiéramos podido tener en España o Monte Carlo, si las cosas hubieran sido distintas”.
Sin duda, el camino de Haas ha estado plagado de situaciones adversas. De momento, cualquier esperanza de puntos ha sido sujeta al brillante regreso de Magnussen. Mientras, seguramente, siguen esperando que despierte la promesa del joven Mick. ¿Será acaso que Azerbaiyán signifique los primeros puntos de Schumacher en la F1?
Personalmente espero que no decepcione al equipo, en una jornada tan dura que tienen frente a dos Grandes Premios consecutivos.