El Circuito Urbano de Bakú en Azerbaiyán es un trazado muy particular con características ciertamente únicas. Su fabulosa y angosta “curva del castillo” en el sector 2, curva que se debe hacer a una velocidad muy reducida. Un lugar donde pilotos como Charles Leclerc tuvieron diversos incidentes. Por otro lado, tenemos la larga recta de, aproximadamente, 2.2 Kilómetros donde, similar a Monza, el rebufo durante la clasificación es algo de vital de importancia.
Durante el final de la Q3, tanto Sergio Pérez como Max Verstappen quedaron mano a mano para pelear por la Pole Position. El holandés salió de su box listo para intentar de nuevo una vuelta rápida, el mexicano permaneció en boxes durante un tiempo, factor que hizo encender las alarmas del piloto neerlandés preguntando a su ingeniero:
“¿Por que me sacan a mi primero?”.
Las intenciones del actual campeón de la categoría eran claras, usar el rebufo de su compañero en la recta principal para buscar el 1er cajón de salida para el domingo. Pero 30 segundos después recién “Checo” Pérez salió a dar su vuelta de clasificación y simplemente no hubo rebufo para ninguno.
Habiéndose desatado la polémica, los medios presentes en el trazado de Bakú le preguntaron al neerlandés por sus dichos. Max aclaraba la situación así:
“Nosotros siempre lo acordamos de antemano, un fin de semana salgo yo primero y el otro fin de semana sale Checo. Por eso pregunté por radio”.
Esto nos muestra una curiosa forma de manejar las clasificaciones por parte del equipo Red Bull. A pesar de esto, también se confirmo que el auto del piloto mexicano tuvo problemas con el repostaje, hecho que influyó en la tardía salida.
Eso no quiere decir que su carrera esté terminada. Se demostró a lo largo del fin de semana que Red Bull brilla en ritmo de carrera mientras que Ferrari hace lo propio en clasificación.
Claramente esto no es un hecho que genera tensiones dentro de la estructura, sino algo más relacionado con la mala fortuna. Verstappen debe conformarse con una P3 para mañana sin remedio alguno, pero aún con posibilidades reales de obtener una nueva victoria.