Otro inicio complicado para Sergio Pérez este fin de semana en el Hungaroring. Desde el día de ayer el piloto mexicano batalló para encontrar la puesta a punto en el auto. Pero hoy en la clasificación, a diferencia de la semana pasada en Francia, las cosas no salieron.
Checo largará el Gran Premio de Hungría desde la posición 11, detrás de su compañero de equipo Max Verstappen, tras una clasificación difícil para Red Bull.
En la Q1 logró cruzar en la décimo tercera posición a 744 milésimas del líder. Pero los problemas mayores se presentaron en la Q2. Comenzando con la eliminación de su primer intento de vuelta rápida. La cual posteriormente sería recuperada al demostrar que no salió de los límites de la pista.
Para el segundo intento, el tráfico afectó al piloto tapatío, cuando se encontró al Haas de Kevin Magnussen:
“Fue muy desafortunado con los límites de la pista, me regresaron el tiempo. Luego me encontré a Magnussen en la curva 2 y tuve que ir muy dentro de la curva, perdí un par de décimas. Después en la vuelta no pude recuperar lo suficiente”.
A pesar de ello, Pérez señala que el RB18 no está donde él y el equipo quisieran:
“Ha sido un fin de semana complicado, hasta ahora. Mañana intentaremos recuperar”.
El Hungaroring no ha sido el mejor trazado para el mexicano. Sin embargo espera poder mejorar el séptimo puesto conseguido en 2020 con Racing Point:
“Es una carrera larga sin duda, aunque pasar aquí es muy difícil. Pero intentaremos sumar algunos puntos. Espero que en la carrera nos podamos recuperar”.
Aunque el fin de semana no pinta tan bien para Red Bull, las condiciones climatológicas nos pueden traer sorpresas, como la pole position de George Russell el día de hoy.
Checo se encuentra en el tercer puesto del campeonato de pilotos a siete puntos de Charles Leclerc y a 70 de Verstappen. Detrás de él están Carlos Sainz y Russell, que parten en la primera fila. Por lo que recuperar y sumar puntos es la prioridad Pérez.