Este fin de semana tenemos la segunda carrera de esta triple cartelera consecutiva de Fórmula 1. Lo que deja muy poco tiempo para los equipos y los pilotos. Sin embargo, el mexicano Sergio Pérez destinó el poco tiempo a hacer la tarea en el simulador.
Claramente Checo sentía que debía encontrar la razón de la distancia tan abismal de Max Verstappen el domingo pasado, como les informamos en Tercer Equipo.
Así que ahora el jueves previo al Gran Premio de los Países Bajos, Pérez confirmó que tuvo que trabajar y se siente mejor:
“Sí, Max fue súper, súper rápido el último fin de semana. Realmente, muy fuerte. He estado en el simulador esta semana, tratando de entender todo. Y espero ser capaz de conseguir un extra en mi lado”.
Sobre cómo puede evitar que le afecte personalmente la ventaja que Verstappen marcó, el tapatío señaló lo que siempre ha hecho. Trabajar:
“Sólo haciendo todo lo que pueda de mi lado. Asegurarme que entiendo por qué hubo esa diferencia allí. Qué tengo que hacer diferente y cómo puedo explotar más el auto. Y eso es todo, ya sabes.
Hay mucho que puedo hacer. No voy a bajar más que eso. Eso es lo que es. Al final del día, también tengo un campeonato y una carrera para luchar. Así que cada fin de semana es una nueva oportunidad”.
Sin embargo, todos notamos que la primera parte de la temporada, Checo se encontraba mucho más cerca del campeón reinante. Su ritmo era muy fuerte, consiguió adaptarse primero al RB18. Pero poco a poco la situación en el equipo ha ido cambiando. Y aunque Christian Horner o Adrian Newey digan que no, el desarrollo del auto ha ido hacia el estilo de manejo del neerlandés.
Pérez fue cuestionado sobre eso frente a los medios en Zandvoort:
“Creo que al principio me sentía más cómodo, cada vez que llegaba a un fin de semana en la primera práctica ya me sentía fácilmente feliz con el balance, y las cosas me salían naturalmente. A medida que avanzó la temporada parece que se ha vuelto más y más difícil.
Cada fin de semana tengo que hacer un análisis más profundo. Y sí, no me siento tan cómodo como antes con el auto. Es un poco en esa dirección. Obviamente el coche ha evolucionado y ha ido en una determinada dirección. Pero sí, ahora mismo, mi principal objetivo es asegurarme de que soy capaz de controlarlo”.
El año pasado Zandvoort no trató del todo bien al mexicano. Sin embargo tuvo una gran carrera regresando desde el fondo. Realizó rebases en una pista en la que casi nadie lo consiguió.
Así que este año llega preparado para el desafió, con la tarea hecha y listo para buscar separarse de Charles Leclerc en el campeonato de pilotos y acercarse a su compañero en Red Bull, tras el 1-2 de la semana pasada donde consiguió el podio 22 de su carrera.