Por segundo día consecutivo, Fernando Alonso ha puesto en los primeros lugares de la clasificación a su Aston Martin. Y por segundo día se le nota fuerte, fresco y sonriente.
Una vez terminado el post mortem de la jornada con sus ingenieros, Alonso camina relajado, responde a la prensa en su camino a su suite.
Se le pregunta su sentir después de dar 130 vueltas en el monoplaza, el asturiano, con bastantes kilos de menos en el rostro responde:
«Si, fue bueno claro, muchas vueltas. Para mi era muy importante, porque solo había dado una vuelta por ahí en el auto del año pasado.
Así que aprendí muchas cosas, se sintió genial. Estoy muy feliz por el día».
Le preguntan si se ha sentido bien físicamente después de la enorme jornada que ha vivido, con una amplia sonrisa asienta:
«Se sintió muy bien, muy bien porque, obvio, he estado entrenando todo el invierno, pero ahora ya dentro del auto empiezas a trabajar otros músculos.
No hay mejor entrenamiento que manejar el auto, me siento con mejor forma física y listo para las carreras del año».
Sobre lo que le ha podido sentir del auto y que espera del principio de la temporada, el asturiano simplemente demuestra su gusto por estar en al volante de un Fórmula 1:
«Si, solo me falta medio de día de trabajo en el auto, la jornada de la tarde. Por supuesto, quisiéramos seguir probando por 10, 20 días si fuera posible.
Hay tantas cosas que quedan por descubrir en el auto, pero es lo mismo para todos.
La primera carrera va a ser especial para mi, ser parte de Aston Martin por primera vez. Estoy muy orgulloso de este equipo».
Si bien es difícil predecir la velocidad relativa del Aston Martin en la parrilla, la confianza mostrada por Alonso solo puede significar una cosa: si el AMR23 está a 5 décimas de segundo de la punta, él lo pondrá en la pelea.
Todo puede cambiar el próximo viernes con la primera práctica oficial del GP de Bahréin. Pero por el momento Alonso disfruta del inicio de este año, como si fuera el primero de su carrera.
El cronómetro será el juez que determine la magnitud de la misión del asturiano para este año. Pero la sensación es tentadoramente positiva.