Haas dio el banderazo de salida rumbo a la próxima temporada 2023 de Fórmula 1. Siendo el primer equipo en hacer la presentación de su monoplaza el pasado 31 de enero, mostró solamente versiones digitales de lo que sería el aspecto del VF-23, mismo que sorprendiera por el protagonista color negro en su livery para este año.
Hoy, casi dos semanas después, el VF-23 ha sido revelado mediante las redes sociales del equipo estadounidense, previo a rodar por primera vez. También lo hizo el RB19 de Red Bull, con sendos shakedowns este fin de semana en el mítico circuito de Silverstone.
Por su parte, los del Milton Keynes presentaron una maqueta hace unos días en New York. Además, anunciaron su alianza con Ford para 2026.
Pero en Silverstone, pudimos ver parte de lo que será el auto real. Red Bull intentará retener los campeonatos tanto de constructores como de pilotos, y de esta manera, emular la temporada de ensueño del año pasado con el RB18.
Los actuales campeones realizaron su prueba en el circuito sede del GP de Gran Bretaña en la jornada del viernes. Se pudo ver un cono delantero más angosto que el anterior, sidepots más compactos y en caída a la nueva entrada de aire. También una pendiente más pronunciada en la toma de aire superior a la que estábamos acostumbrados.
Mientras tanto, el equipo americano haría lo propio el sábado de cara a una nueva temporada. Con cambio de imagen incluido y algunos guiños al F1-75 de Ferrari del año anterior, se observan unos sidepots rediseñados y un escalón en el suelo que la escudería italiana utilizó en 2022.
Son detalles que apenas se pueden apreciar en las fotos de las redes del equipo, en donde figuran posando junto al monoplaza el director Guenther Steiner y sus pilotos, Kevin Magnussen y Nico Hülkenberg. El alemán regresa después de tres temporadas como suplente en las que disputó cuatro Grandes Premios, dos con Racing Point y dos más con Aston Martin.
Magnussen rodó en pista el VF-23 de Haas. Debido a las condiciones del circuito, lo hizo con neumáticos de lluvia extrema.
Recordemos que estas pruebas son limitadas a 100 km, lo que serían casi 17 vueltas en el circuito británico.
Todas se realizan con fines comerciales, por lo que los neumáticos no son los mismos con los que correrán dentro de tres semanas en Bahréin.