A pesar de que Red Bull marcó el ritmo en las dos sesiones de práctica iniciales antes del Gran Premio de Arabia Saudí, Sergio Pérez admite que experimentó un problema durante la FP2.
Fue otra fuerte demostración para Red Bull, con Max Verstappen encabezando la tabla de tiempos mientras que Pérez marcó la tercera vuelta más rápida de la sesión.
Sin embargo, el mexicano admite que no todo fue fácil para el equipo, ya que se enfrentó a un problema con su RB19:
«Tuvimos un pequeño problema mecánico con el auto, que esperamos poder resolver para mañana.
Eso nos traerá un poco más de ritmo, con suerte, al menos podremos tener una mejor idea de dónde está el auto.
Sufrimos de un poco de inconsistencia, es difícil tener una lectura adecuada hoy. En general, parece que estamos fuertes, pero la competencia está allí como se esperaba».
Al preguntársele si podía decir algo más sobre la naturaleza del problema mecánico, Pérez respondió:
«No puedo entrar en muchos detalles, pero creo que estamos seguros de que deberíamos poder solucionarlo mañana.
Pérez también fue interrogado sobre si Verstappen es su mayor rival para el fin de semana.
«¡Ojalá que si! Eso significaría que estamos en una posición muy fuerte, pero creo que algunos de los equipos rivales estarán ahí luchando mañana».
Habrá que recordar que el año pasado, Pérez consiguió la que hasta el momento sigue siendo su única Pole position en su carrera en este circuito.
Sin embargo, esta no es la misma pista. Durante el invierno, la organización árabe recibió varias anotaciones por parte de la F1 sobre varias zonas que se percibieron sumamente peligrosas en las dos ediciones pasadas.
Así que se han abierto las zonas de escape, se añadieron varios elementos disuasorios para alejar a los pilotos de las barreras. Crucialmente, se modificó la curva 22 para hacerla más lenta.
A pesar de los cambios, el mexicano estará seguramente en la pelea mañana. Una clasificación decisiva para su estado de ánimo y sus esperanzas para el campeonato este año.