Las expectativas sobre el GP de la Ciudad de México fueron en aumento durante los días previos al domingo. Todo estaba preparado y se esperaba un buen rendimiento de varios equipos, con los Red Bull como favoritos, como ha sido todo el año.
Luego de algunos cambios en la parte trasera de la parrilla de salida, con Lance Stroll obligado a salir del PitLane, y Logan Sargeant con su penalización de 10 posiciones.
Pocas veces se había sentido tanta expectación para la carrera en México. La tensión aumentó cuando los semáforos se apagaron. Los dos Red Bull salieron disparados, atacando de inmediato a los dos Ferrari.
Max Verstappen por dentro intentaba superar a Charles Leclerc que se quedaba en medio de la pista. La emoción llegó al límite cuando Sergio Pérez iba por fuera más rápido que todos, colocándose por instantes por delante.
Pero los gritos de emoción cambiaron a un impresionante NO porque, al querer doblar, se tocó con el Ferrari de Leclerc que frenó tarde para proteger su posición. El auto de Checo salió volando al enllantarse, rompiendo la suspensión trasera y varias partes del costado. Fin de la carrera para el mexicano. Una verdadera pena. ¿Culpa de él? ¿Culpa de alguien más? Aquí creemos que aplica el famoso dicho: “El verdadero piloto si ve un espacio, va por él, si no, no es un piloto de carreras”.
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Verstappen se colocaba primero y comenzaba a hacer lo mismo de siempre, alejarse de los demás aprovechando el aire limpio. Los dos Ferrari detrás de él, con Daniel Ricciardo haciendo lo posible por no alejarse.
Lewis Hamilton tuvo alguno que otro problema para adelantar al australiano. Una vez en la cuarta posición, el rendimiento del Mercedes ponía bajo amenaza a los de Maranello.
Unas vueltas después, Verstappen comenzaba con problemas en las gomas delanteras. El llamado al box parecía muy pronto, entrando en la 20 a poner los duros. La temperatura del asfalto en la primera parte de la carrera estaba haciendo de las suyas.
Pero el RB19 aceptó muy bien es compuesto blanco, y sólo dos vueltas después, Max pasó a George Russell como si estuviera parado. Lo mismo con Oscar Piastri una vuelta más tarde. Estaba claro en este momento de la carrera que los Ferrari apostaban por una sola parada.
En la parte de atrás, dolía ver a Fernando Alonso sin ritmo, mientras que Lando Norris comenzaba su trabajo de remontada pasando al asturiano.
Las cosas se comenzaron a mover en la parte estratégica. Llegada la vuelta 25, Leclerc se alejaba de Carlos Sainz, mientras Hamilton entraba a pits. En tanto que Max seguía avanzando dando cuenta de Ricciardo como si no estuviera ahí el de AlphaTauri.
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Las próximas vueltas se trataron de Verstappen recuperando posiciones, pero la emoción la comenzaba a dar Norris. La calidad de conducción que estaba haciendo el británico lo ponía en capacidad de llegar bastante lejos.
Su compañero de equipo, con un ritmo un poco menor, también se mostraba sólido, siendo que era la primera vez que corría en esta pista.
Casi en la mitad de la carrera, el intento de undercut que hizo Mercedes funcionó. Sainz entró a boxes en la vuelta 31, pero salió justo detrás de Lewis. Una vuelta más tarde entró Leclerc, con mucho más ventaja en la salida.
Hasta que llegó la vuelta 33 que trastocó un poco las cosas. Kevin Magnussen sufría un fuerte golpe en las barreras del complejo de las eses. La suspensión de su Haas se rompió en la curva 9 y de ahí se convirtió en pasajero.
Primera Bandera Roja en la historia reciente del Gran Premio mexicano. Los beneficiados fueron los Ferrari, los Mercedes, los McLaren y los AlphaTauri.
20 minutos después, resalida en parado. Se apagaron los semáforos y Max, con gomas duras, consiguió mantener a Leclerc por detrás. El monegasco además se defendió muy bien de Hamilton que largaba con gomas medias.
Russell sí que conseguía dos posiciones, las de los dos autos papaya. Piastri evitando un golpe, y Norris quitándose de en medio del sándwich que le hacían. La sorpresa volvió a ser por parte de Ricciardo que se mantenía en P6.
En el momento en que se activó el DRS, Hamilton se puso en modo caza, atrapando al SF23 número 16 en la vuelta 40 con todo y salida al césped.
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De ahí en adelante, la carrera se convirtió en lo que la historia nos ha contado. Sólo un piloto nos salvó de la aburrición total. Norris empezó su segunda remontada de manera impresionante. Desde el equipo se dieron cuenta y no permitieron un duelo entre compañeros que lo retrasara. Además, con adelantamientos impresionantes tanto a Ricciardo como a Russell. Piloto del día sin duda.
A dos vueltas, se veía a Stroll muy agresivo, al punto de ser peligroso. Tanto que se tocó con Valtteri Bottas de forma increíble. Abandono del canadiense en su día de cumpleaños, y dejando al de Alfa Romeo sin las opciones que estaba teniendo de pelear por el último punto.
Verstappen cruzó la bandera a cuadros para romper el récord de más victorias en una temporada, y superando al gran Jim Clark como máximo ganador en el GP de México. Hamilton terminó segundo con vuelta rápida en una muy buena carrera, y Leclerc tercero minimizando daños.
Próxima parada, el GP de Brasil, en el mítico Interlagos, con formato Sprint.
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