Carlos Sainz se despide del GP de Arabia Saudí tras confirmarse el ingreso en el hospital para ser intervenido de apendicitis. El mismo miércoles, día donde los medios de comunicación tienen el protagonismo, el piloto español no pudo asistir por indisposición. Durante todo el día estuvo en el hotel donde se hospeda la Scuderia Ferrari. Eso sí, con vistas a mejorarse para los Libres 1 y Libres 2 del jueves.
Realizó los deberes en el Circuito de la Corniche de Jeddah. Sin embargo, cada vez que saltaba del monoplaza lo hacía con la mano en el abdomen. Sumado a la fiebre que sufrió durante todo el día, los síntomas de apendicitis eran claros. En el año donde tiene que plantarle cara a Charles Leclerc y demostrarse a sí mismo y a Ferrari que se han equivocado tiene que perderse una carrera. Ya le ocurrió en el sufrido GP de Qatar 2023. Su SF-23 no estuvo disponible para la carrera por una fuga en los conductos de gasolina.
En su lugar, Oliver Bearman, piloto de la academia Ferrari que disputa la Formula 2, será el relevo del piloto madrileño. Cumplirá las labores que le acontecen en los Libres 3, Clasificación y, claramente, la carrera del sábado. Dentro de lo que supone que Carlos Sainz se pierda la carrera, como no ganar más puntos como equipo y en el mundial de pilotos, lo positivo es que el piloto británico Bearman tiene la oportunidad de demostrar su valía.
Hacer un buen papel en su debut sería fundamental para postularse a un asiento en una Formula 1 con más de la mitad de pilotos sin contrato en 2025. Eso sí, debutar en un circuito como el de Jeddah no es la mejor opción. Chocarse contra el muro es una posibilidad muy grande, y más si Bearman nunca ha pilotado un F1 en situación de carrera.