El directivo ha mencionado a Daniel Ricciardo, Max Verstappen y Carlos Sainz, pero no a Daniil Kvyat. También ha explicado la amenzada de la salida de Red Bull de la Fórmula 1
Helmut Marko ha salido al paso de la ‘silly season’, que está al llegar. El austriaco ha querido zanjar el asunto antes de que comience, asegurando que ambos pilotos de Red Bull permanecerán en la escudería de la bebida energética en 2018, ya que tienen contrato para ello.
“Ricciardo y Verstappen tienen contratos fijos. Ricciardo hasta 2018 y Verstappen aún más allá de ese año mediante cláusulas”.
El directivo también ha hablado sobre Carlos Sainz, que ha demostrado un buen nivel en Toro Rosso y cuyo nombre aparece en múltiples rumores que indican que podría cambiar de equipo al finalizar el año.
“Esto también se aplica a Carlos Sainz, que está atado a nosotros hasta 2019. Solo nosotros podemos finalizar los contratos, no los pilotos”.
Curiosamente, Marko no ha mencionado a Daniil Kvyat, que se ha visto superado por Carlos Sainz en 2016 y en lo que llevamos de 2017 tras pasar de Red Bull a Toro Rosso después del GP de Rusia de la pasada temporada.
Por otro lado, el austriaco ha explicado las amenazas de abandono por parte de Red Bull de la Fórmula 1 si la normativa de motores continúa siendo similar tras 2020.
“Queremos tener un conjunto de normas en el futuro para que el motor sea más sencillo y se pueda producir de forma competitiva por suministradores independientes. De lo contrario esto significa que estamos siendo vulnerables al chantaje y dependientes de los fabricantes de los automóviles, que mandan en la categoría reina”.
Helmut ha afirmado que quiere: “Un diez cilindros o incluso un V12”, para luego continuar: “Tal accionamiento solo puede costar 8 millones de euros, y no 20 como ocurre ahora. Algunas partes, como el turbo y el KERS, deben ser comunes. El motor debe ser potente, tiene que tener 1000CV”.
Por último, ha declarado que el manejo de los pilotos debe ser el protagonista de la máxima categoría del automovilismo, sin tanto control por parte de los ingenieros.
“Las habilidades del conductor tienen que destacar. En este momento, los pilotos están siendo controlados por los ingenieros. Este no es el verdadero significado de la Fórmula 1”, ha finalizado.