Que Lewis Hamilton es una estrella mundial, no creo que quepa duda. Que lo demostró desde el día que debutó junto a Fernando Alonso, es un hecho. Por otra parte, vivimos tiempos en los que las hazañas parecen menores, tiempos de haters, de infravalorar.
Toto Wolff con Dietrix Zetsche – Vía: Mercedes
Tampoco es menos cierto que la sombra de llevar el mejor coche ha perseguido eternamente a los campeones. Lo que pasa, es que en el caso de Hamilton, el Mercedes es muy muy muy muy buen coche, y el equipo, una delicia. La era híbrida ha sido suya, a placer, y de Lewis (con permiso de Nico Rosberg). Y de momento, no tengo esperanzas de que esto cambie. Cuando lees que empezaron hace 16 meses a desarrollar el coche de este año, te haces una idea de la magnitud de su ventaja.
Aún así, no nos engañemos, el británico está «on-fire». Ha cometido poquísimos errores, mostrando una fortaleza mental de la que, por ejemplo, Sebastian Vettel no puede hacer gala ahora mismo. Ojo, su vida no está en una etapa difícil: gran coche, enorme equipo. En Mercedes apuestan por él, sin dudas, sin las «milongas» que sufrieron en la época Rosberg, Ahí tenemos a un gran escudero, Valtteri Bottas.
En una reciente entrevista a The National, el jefe de Lewis, Toto Wolff, ha dado su punto de vista al respecto de la enorme calidad de su piloto:
«Lewis y Michael Schumacher son los mejores pilotos que hemos visto. Lo valoraremos cuando se vaya, es la tendencia, no valorar a alguien lo suficiente mientras lo tenemos. Es un deportista fuera de serie, un gran tipo, es un apoyo esencial del equipo, siempre lo elogia, otros no suelen hacerlo. Además, la clave es una sinceridad enorme. Cuando nos reunimos no tenemos pelos en la lengua para decir lo que fue correcto y lo que no, y eso es algo que ha mejorado la relación y él tiene una gran actitud al respecto».
Es innegable. Nadie es pentacampeón de casualidad. Ni bicampeón. Ni tetracampeón. Es algo al alcance de los mejores, y a día de hoy, Lewis está ahí. Es la referencia.
No debemos olvidar algo, la realidad es que cuando las cosas van bien, todo son flores. Pero como se suele decir, cuando la pobreza entra por la puerta, el amor salta por la ventana. Tenemos un 2019 emocionante y hay muchas incógnitas. Si el mejor Sebastian Vettel vuelve, o si Charles Leclerc está por encima de ese Vettel, y el Ferrari consigue «toser» al Mercedes, podrían ser unas de ellas. Dónde estarán los Red Bull – Honda, otra (muy importante). Compararemos estas declaraciones con las de final de año.
