La sanción de tres puestos que impusieron ayer a Carlos Sainz, ya era un pequeño lastre para la carrera del español, el cual lograba realizar una buena largada y lograba mantener la 11ª plaza con la que salía desde la parrilla. Pero en la 4ª vuelta, el español tuvo que adelantar su única para en boxes, por problemas con la temperatura de su pinza de frenos, ya que un tear-off de otro piloto se ha quedado atascado en su conducto de frenos. En esta parada le montaron las gomas más duras y de ahí hasta el final.
Cuando el resto de pilotos han ido realzando sus paradas, el español ha ido remontando, hasta situarse claramente en zona de puntos, pero las gomas poco a poco han ido perdiendo rendimiento, y al final veía, cuando iba 9º, como en la penúltima vuelta le superaba Lance Stroll y en la última Daniil Kvyat, y se quedaba a las puertas de sumar.
Así lo explicaba el madrileño al terminar la carrera:
«Un tear-off ha tapado un conducto de refrigeración de los frenos. Era urgente parar, no podíamos esperar. Sin duda eso nos ha condicionado toda la carrera. Hemos salido relativamente bien. He estado a punto de pasar a Kvyat y empezar la remontada, pero el parar en la vuelta 4 lo arruino todo. Hemos intentado hacer un stint muy largo con los duros, adelantando a coches, defendiéndonos, luego volviendo a atacar. No he podido cuidar mucho las ruedas, porque teníamos que remontar y todo eso lo hemos pagado en las últimas vueltas. Nos han sobrado 5 vueltas».
Sainz ha dejado claro su desencanto, ya no solo por el incidente en sí, sino porque esperaba luchar con los Renault:
«A pesar de esto, yo hoy esperaba algo más, no sólo poder ser noveno, sino luchar con los Renault ahí arriba. Hoy pasaba por hacer una tanda larga al principio y luego poner los neumáticos duros, con los que sabíamos que teníamos un buen ritmo. Pero ponerlas tan pronto nos ha condicionado toda la carrera. Ha sido una pena, pero esto es así».