La noticia estrella del paró de verano ha sido el intercambio de pilotos entre Red Bull y Toro Rosso. Pierre Gasly bajará al segundo equipo de Red Bull después de que sus resultados durante la temporada no han sido los esperados, algo que se venía especulando desde hace varias carreras. Su sustituto será Alex Albon, que subirá al Red Bull en el GP de Bélgica. Verstappen ha hablado sobre este cambio y ha dejado claro que no le importa quien sea su compañero de equipo.
Pero el piloto holandés ha asegurado que siente lástima por Gasly, su excompañero:
“Sinceramente, no me importa mucho quien sea mi compañero de equipo. Por supuesto, es una pena para Pierre, pero así es el mundo de las carreras”.
Albon ha disputado esta temporada sus primeras 12 carreras en la F1. Es otro joven talento de la casa y del que Red Bull espera una mejor adaptación y rendimiento. Por su parte, Verstappen cree que lo más importante es que el piloto tailandés-británico se sienta cómodo con el coche y que su buena actuación ayude al equipo a ganar puntos en el mundial de constructores.
“El principal objetivo es tener una buena sensación con el coche y lograr los mejores resultados posibles. Buscamos obtener el máximo número de puntos posibles, que nos permitan luchar por ser segundos en constructores», finalizó el piloto.
Red Bull se encuentra luchando ahora mismo por conseguir batir a Ferrari en el mundial de constructores. A pesar de las victorias de su primer piloto, los malos resultados cosechados por Pierre Gasly estaban frenando este objetivo. Tanto Helmut Marko como Christian Horner habían declarado que el piloto francés estaría en el equipo hasta final de temporada, pero finalmente dieron el drástico cambio en busca de sumar los puntos necesarios en las nueve carreras restantes.
Albon publicó la noticia de su ascenso a Red Bull en sus redes sociales, al que catalogó de “surrealista”:
“Es surrealista haber recibido esta increíble oportunidad de Red Bull”.
Ahora veremos si el novato puede aportar lo que Red Bull busca en él.