La primera temporada completa de Antonio Giovinazzi en Fórmula 1 está dejando que desear. Si bien es cierto que las sensaciones que transmitió cuando disputó los Grandes Premios de Australia y China en 2017, sustituyendo al por entonces lesionado Pascal Wehrlein, fueron positivas, su regreso a las pistas de la máxima categoría del automovilismo dos años después está defraudando.
El italiano, que pilota para Alfa Romeo, apenas ha superado en contadas ocasiones a su compañero Kimi Räikkönen en clasificación, mientras que en carrera tan solo acumula 3 puntos frente a los 31 del finlandés. Solo un décimo puesto en el GP de Austria y una novena plaza en el GP de Italia han permitido sumar puntos a Giovinazzi.
Sin embargo, Antonio no se muestra preocupado sobre su futuro. Considera que los dos últimos Grandes Premios disputados han sido positivos, con su noveno puesto en Monza y tras haber rodado también noveno hasta la última vuelta en el GP de Bélgica, cuando perdió el control de su monoplaza y acabó contra las protecciones:
“No quiero pensar mucho en el año que viene. Si lo hago bien, nadie me quitará el puesto. En Spa fui noveno hasta la última vuelta y en Italia acabé noveno”, ha dicho para el diario italiano Autosprint.
Sobre la próxima carrera, que tendrá lugar en Singapur, Giovinazzi cree que, a pesar de ser una pista muy distinta a las anteriores, el equipo puede obtener un buen resultado:
“Singapur será un circuito diferente, con mucha carga aerodinámica. Tenemos que ver cómo irá el coche, pero creo que podemos lograr un buen resultado. El coche no es malo en los circuitos de alta carga y a mí me gustan los circuitos urbanos”, ha finalizado.