Las dos primeras fechas de la temporada 2020 de la Fórmula 1 confirmaron los temores de los equipos sobre el desempeño de Racing Point.
A pesar de encontrarse en el cuarto puesto del campeonato de constructores, el equipo canadiense ha mostrado que tiene para pelear por podios y en algún descuido, tal vez un triunfo.
Tras un Gran Premio de Estiria donde Sergio Pérez y Lance Stroll se quedaban con los puestos 6 y 7, venciendo en la pista a Daniel Ricciardo, el equipo Renault decidió solicitar a los comisarios del evento aclarar la legalidad del RP20.
Pocas horas después la FIA informó haber recibido una protesta de Renault contra Racing Point. Esta en relación con una supuesta violación de los siguientes artículos del Reglamento Deportivo de Fórmula 1 2020: Artículos 2.1, 3.2, Apéndice 6, Párrafos 1, 2(a) y 2(c), con respecto a los conductos de freno delantero y trasero utilizados en los autos 11 y 18.
Los comisarios convocaron y escucharon a los representantes de ambos equipos. Así como a un representante del departamento técnico de la FIA. Determinaron que la protesta cumplía con todos los requisitos especificados en el Artículo 13 del Código Deportivo Internacional de la FIA y, por lo tanto, es admisible.
El representante del departamento técnico de la FIA recibió instrucciones de sellar y confiscar las partes referidas de los autos 11 y 18. Esto para realizar un análisis detallado de esas piezas y entregarlo a los comisarios con una evaluación de los resultados.
Además dieron autoridad al representante técnico para que solicite la información que necesite a los equipos Racing Point, Renault e incluso Mercedes, a quien se supone que el equipo canadiense ha copiado.
Pidieron al equipo alemán que entregara los conductos de freno delantero y trasero utilizados en el W10 en la temporada 2019 para su evaluación.
El comunicado indica que cuando se cuente con la evaluación completa se citará nuevamente a las partes para tomar una decisión, sin embargo no hay fecha prevista.
Cuando el RP20 saltó a la pista en los tests de pretemporada en Barcelona, dieron mucho de qué hablar por el parecido con el W10. Incluso fueron investigados y la FIA visitó la planta en Silverstone, pero fue determinado que el RP20 era legal.
En abril pasado Cyril Abiteboul, jefe del equipo francés dejaba abierta la puerta para enfrentar en la mesa al equipo de Lawrence Stroll más adelante:
“No iré más allá, en esta etapa, pero la extrema similitud entre el Mercedes W10 y el Racing Point RP20 es algo de lo que nos seguimos preguntando”.
Y así lo hizo ahora, con dos abandonos y dos cuartos puestos (uno de cada piloto), Renault ha decidido que es mejor pelearle en la mesa al equipo canadiense.
No queda más que esperar los resultados de la investigación técnica de la FIA, pero para mí, esas batallas si son en la pista son mucho más divertidas.