Mercedes sacó matrícula de honor en el pasado GP de Bélgica después de romper la racha de dos victorias consecutivas de Ferrari con un doblete y ahora quiere seguir con la fiesta en el GP de Italia.
El mayor misterio para los de la gran estrella será comprobar como afecta la prohibición del modo fiesta en qualy y si traerá consecuencias en la jerarquía de la parrilla.
Su jefe de equipo, Toto Wolff se muestra satisfecho por el rendimiento de su W11 en todas las pistas que han visitado hasta ahora:
«Hace unas semanas estaba en pista en Silverstone viendo nuestro coche en Maggotts y Becketts; el fin de semana en Spa, lo vi por Malmedy y Pouhon. Ver a nuestro W11 pilotado con rabia y atacando con todo es verdaderamente impresionante y muestra el esfuerzo colosal de todo el mundo de Brackley y Brixworth para crear una máquina potente»
Tras la carrera de Spa, el paddock se dirige al doblete transalpino con las carreras en Monza y el debut de Mugello, pero Wolff solo piensa en la carrera de Monza:
«La segunda y la tercera carrera de este triplete nos lleva a Italia, a Monza y Mugello. El famoso ‘Templo de Velocidad’ es realmente un circuito de baja resistencia y carga aerodinámica, en el que la velocidad en recta es crucial para tener un buen resultado. La carrera se ganaba con frecuencia desde la Pole en el pasado, eso hace la clasificación particularmente importante en Italia»
La prohibición del modo fiesta se retrasó su implementación a esta carrera y será interesante ver como afecta en la clasificación a los coches:
«La directiva técnica TD/037-20 limita el uso de los modos de motor y requiere que los equipos usen el mismo modo del motor de combustión en clasificación y en carrera. Nos intriga ver cómo afecta el orden competitivo absoluto y relativo el sábado y el domingo; nos emociona el reto y la oportunidad de poderle sacar ventaja»