En el Circuito Urbano de Bakú nunca falta la emoción. Pero la del día de hoy fue una carrera de infarto. Sergio Pérez se quedó con el triunfo en un complicado Gran Premio de Azerbaiyán.
El equipo Red Bull dominó, como había hecho desde el viernes, pero Lewis Hamilton les dio gran batalla. El día de ayer en calificación las cosas no habían resultado del todo bien para los toros.
Sin embargo desde muy pronto en la carrera comenzaron el ataque, hasta colocarse en el 1-2. Todo parecía indicar que a esta edición de Azerbaiyán le faltaría la parte dramática, hasta que Max Verstappen tuvo una pinchadura que provocó que se fuera contra el muro, provocando una bandera roja cuando faltaban 3 vueltas. Pasando así Checo a la punta.
Con la emoción del final es fácil olvidarse de todo lo que tuvo que hacer Pérez para estar ahí. El tapatío largó sexto y en la primera vuelta pudo adelantar a Carlos Sainz y luego a Pierre Gasly. Antes de parar en boxes, realizó vueltas rápidas que le permitieron hacer nuevamente un undercut, a pesar de una parada lenta de Red Bull y así salir por delante de Hamilton, tal como lo hizo en Mónaco.
A partir de ahí, Verstappen se fue tranquilo adelante, mientras que Pérez tuvo que contener por gran parte de la carrera al piloto inglés. Pero llegaba el accidente de Verstappen y la FIA decidía sacar la bandera roja.
Esa decisión ponía en una situación complicada a Sergio Pérez, pues tendría que pelear mano a mano para defender ese puesto. Sabemos que Hamilton es un cazador, pero al mejor cazador se le va la liebre.
La relargada fue con autos parados, con un stint de 2 vueltas. El inglés de Mercedes cometió un error al llegar a la primera curva y Checo se quedaría con el desafío de hacer llegar a la meta un auto que tenía problemas hidráulicos.
El mexicano explicó así esas últimas vueltas:
“De mi parte era importante mantener esa primera posición. Tuve una mala salida, Lewis tuvo una mejor. Pero teníamos ya los frenos calientes, poco agarre. Frené un poco tarde, lo más tarde que podía en la línea limpia, cometió un error que le costó un poco caro. Pero así es la belleza del deporte. Algunas veces estás de este lado y otras del otro, pero en general muy contento”.
Pérez sabía que contaba con un buen auto. Se había sentido cómodo todo el fin de semana, a pesar de lo sucedido en calificación:
“Es bastante importante el trabajo que se ha hecho en carrera. Ya teníamos ese ritmo y en calificación, desafortunadamente ayer no lo pudimos mostrar. Hubo cositas ahí que nos fallaron”.
Tras seis carreras en el equipo Red Bull, donde se sabe que la presión es muy fuerte para dar resultados, Checo consigue su primera victoria. Ayudando al equipo a mantenerse por encima de Mercedes en el campeonato de constructores y subiendo al tercer lugar en el de pilotos. Algo relevante en su relación con los de las bebidas energizantes:
“Es muy importante en mi adaptación, en mi motivación. En conocernos más como equipo. Este tipo de momentos une a todos más. Tenemos una montaña rusa en la temporada. Pero momentos buenos, momentos importantes como el día de hoy unen bastante al equipo”.
Este resultado pone a Sergio Pérez como el mexicano con más éxito en la Fórmula 1. Empatando con dos triunfos a Pedro Rodríguez, pero superándolo con 11 podios. Además es el primer compañero de equipo de Max Verstappen que obtiene una victoria en el mismo auto desde Daniel Ricciardo.
Hoy el tapatío mostró por qué fue el elegido para formar parte de Red Bull y están creando un gran equipo. Estoy segura que la madurez que ha alcanzado para pelear en la punta, además de ser rápido y constante, lo llevará aún más alto.