Al igual que en 2020, una de las grandes escuderías que pasa desapercibida en la Fórmula 1 es Alfa Romeo. El equipo es superior a los 2 de zona baja (Haas y Williams) pero no entra en el lote de zona media.
Lejos de cambiar, esta temporada viene siendo algo intrascendente para los de bordó y blanco. En un limbo y siempre luchando por rascar algún punto, Alfa Romeo sigue mostrando que le falta mejorar. Aún con un experimentado Kimi Räikkönen y con un competitivo motor Ferrari, los ex Sauber no consiguen hacer pie.
Luego de este desafortunado aunque esperable inicio, el ex piloto del Cavallino Rampante fue contundente contra sus ingenieros:
«Nunca son carreras fáciles para nosotros así que nos preparamos para eso. Intentamos pelear, pero no tenemos ese nivel, estamos lejos del resto. A pesar de tener una buena salida, siempre tengo que preocuparme más por los espejos que por mirar adelante.
El equipo me remarcó que pudimos puntuar de no ser por el incidente con Pérez, pero esos consuelos no sirven. Son rápidos para buscar excusas pero no para mejorar el auto, por eso debemos despertar y ser mejores. Terminar 11° o 12° no nos sirve de nada».
Después de su presentación en Silverstone, tanto Kimi como Antonio Giovinazzi suman 1 punto cada uno. Con solo 2 puntos, la escudería se ubica solo por encima de Haas y de Williams, a 38 puntos de Alpine, un objetivo casi inalcanzable a esta altura.
En relación a los comentarios del finlandés, el jefe de ingeniería del equipo, Xevi Pujolar admitió las fallas globales en el GP de Gran Bretaña:
“Sabíamos de nuevo que estaríamos peleando cerca de los puntos. Todo depende de si pasa algo en el frente, es ahí donde podemos acercarnos bastante, pero nos falta un poco más.
Con Kimi nos faltó ritmo en el auto para pelear con los de adelante. Tenemos tiempo para analizar lo que pasó el fin de semana, pero imaginábamos una carrera así».