La polémica iniciada en el GP de São Paulo sigue viva. La acción de Max Verstappen sobre Lewis Hamilton está teniendo una gran repercusión en el Gran Circo. El fin de semana pasado, antes del GP de Qatar, los comisarios y el propio director de carrera, Michael Masi, tuvieron una reunión con los pilotos para aclarar qué se puede y qué no se puede hacer durante una carrera.
Como se supo posteriormente gracias a pilotos y jefes de equipo, la reunión no consiguió despejar las dudas sobre qué pasará en el futuro con acciones como la de Verstappen. Recordemos que el neerlandés forzó a Hamilton fuera de línea para mantener la primera posición en Interlagos.
Más de dos semanas después de dicha acción las reacciones y comentarios se siguen sucediendo. El último en comentar lo ocurrido ha sido un escéptico Carlos Sainz:
«Sobre cómo competir, aún no ha quedado claro. Creo que ya habéis oído hablar de esto porque no sabemos qué pasará carrera a carrera, pero parece que en el invierno debería haber una charla que aclare definitivamente la forma en la que podemos correr. Esperemos que eso pueda aclarar un poquito más las cosas».
El piloto de Ferrari no ha sido el único que ha continuado comentando la situación. El propio Hamilton, protagonista junto a Verstappen de la acción que dio comienzo a la polémica, ha dejado claro cómo ve la situación:
«Todos los pilotos, a excepción de Max, están preguntando por la claridad para adelantar».
Fernando Alonso, que esta temporada ha tenido varios rifirrafes con la FIA por acciones en pista, piensa que toda la F1 debe involucrarse para intentar aclarar la situación:
«Todos concordamos en que es necesario saber qué se puede hacer en pista y qué no, necesitamos reglas blancas o negras, no grises.
A veces sientes que te beneficias de ellas, y otras eres el idiota, así que es preferible aclararlo. Esperemos poder mejorarlo juntos. No creo que sea solo un problema de la FIA, sino también de pilotos y equipos, tenemos que trabajar codo con codo».
Lando Norris también se ha pronunciado al respecto, afirmando que se decida lo que se decida, no afectará sustancialmente a su forma de pilotar:
«La mayoría de las cosas se han aclarado, aunque es difícil dar una respuesta definitiva sobre qué se puede hacer en carrera y qué no. No creo que cambie mucho mi forma de pilotar, pero sí dejaría claro qué se puede hacer ahora».
La FIA, los pilotos y las escuderías deberán tener un largo y fructífero debate si no quieren que polémicas como esta sigan ocurriendo carrera tras carrera la temporada que viene.