Charles Leclerc cumplirá una sanción en la parrilla en el Gran Premio de Arabia Saudí enfatizando los problemas de confiabilidad de Ferrari al principio de la temporada.
Leclerc se retiró de la primera carrera de la temporada en Bahréin mientras corría tercero. El equipo mencionó que fue un problema con la unidad de control electrónico.
Justo antes de la carrera, Ferrari había realizado el cambio de dicha unidad junto con el paquete de almacenamiento de energía.
A los pilotos solo se les permiten dos unidades de control electrónico para toda la temporada y Leclerc necesitará un reemplazo para la carrera de este fin de semana en Jeddah.
Será sancionado con al menos 10 puestos en la parrilla, ya que es su primera infracción que excede el límite para ese componente este año.
A pesar de los esfuerzos del equipo, el sistema electrónico del monoplaza rojo no pudo salvarse para el 2° Gran Premio del año.
Fred Vasseur, jefe de equipo en Maranello, confirmó la noticia apenas hace unas horas:
«Desafortunadamente, tendremos que sufrir la penalización en Jeddah dado que solamente podríamos haber cambiado la unidad una vez en la temporada».
Lo anterior dejó a Ferrari en una posición sumamente sensible a las críticas, en la misma semana en que se anunció la salida del líder de concepto de diseño.
David Sánchez, jefe del área aerodinámica se mudará a McLaren a partir del año 2024. Y existen amplios rumores de que el director de carrera Laurent Mekies está próximo a anunciar su salida.
Ferrari realizó mejoras en la confiabilidad de sus unidades de potencia. Se reportó constante mente que corrió sus motores a menor potencia durante 2022 para incrementar la confiabilidad.
Sin embargo, es evidente que muchos otros factores han limitado la confiabilidad de los monoplazas rojos. El factor humano, sin embargo, sigue siendo el principal problema en el seno de la Scuderia