Se operó la semana pasada y esperaba poder llegar al cien por cien, pero Aleix Espargaró ha tenido que pasar por la clínica mobile para sacarse el líquido que se le ha formado en la zona operada
Todos hemos podido ser partícipes del proceso post-operación de Aleix Espargaró y su entrenamiento día tras día para llegar al cien por cien a Mugello. El de Granollers ha finalizado el viernes octavo, a 0.508 milésimas de Pecco Bagnaia, que ha sido el piloto más rápido del día. El problema de Aleix ha llegado porque se le ha creado líquido en la zona operada y ha tenido que estar en la clínica mobile, donde han logrado sacarle todo ese líquido.
El #41 ha hecho mención a las buenas sensaciones que sintió tras la operación del síndrome compartimental. Podía mover su brazo con normalidad y comenzó su entrenamiento tan pronto como fue posible, pero todo tiene un límite. Espargaró ha comentado que cuando se somete a un estrés extra a una zona operada pueden pasar estas cosa. »Sobre el brazo la verdad que me esperaba algo mejor porque esta semana he estado muy bien, pero se me ha inflamado mucho. Me ha hecho mucho líquido durante estos primeros entrenamientos. Me han quitado todo el líquido en la clínica mobile y espero mañana estar ahí».
A pesar de esto, el piloto de Aprilia se siente contento con su día. »Soy muy positivo, será muy agradable luchar con el grupo delantero aquí en Mugello y sinceramente me siento mejor aquí que en Le Mans. Creo que podemos hacer una buena carrera aquí. Soy positivo».
De cara a los problemas que tuvo en Le Mans: »Fue un problema menor. Se rompió una cosa de electrónica. Un sensor de la moto, y la verdad que fue un suspiro porque ese motor con el que salí en agua tenía cien kilómetros. Era nuevo. Así que ha sido positivo que solo haya sido un sensor» explicó Aleix.